“Shapshot” review by Christian M. Siegler
“Instantánea”
¿Por qué no hacer un álbum de instantáneas? Claro, que en un álbum suelen pegarse unas cuantas fotos. Pero, en cambio a ése álbum de Roger Glover está pegando por unas cuantas canciones. Eso sí, son instantáneas … ¡ y como pegan !
En general con “Snapshot” al Sr. Glover le salió un disco que cuenta con muchas buenas virtudes. Es relajado pero vivo a la véz, con mucho estilo y de estilos varios. En fin, como en un verdadero álbum de instantáneas, que no cansa en volver sobre ello porque hay tanto para descubrir.
Bueno pues, por donde nos lleva Roger Glover con su Guilty Party? Está lleno este álbum de Blues, Reggae, Folk, temas que sorprenden con cambios de ritmo, otras canciones bien románticas que nos encantan por su ansiedad y añoranza.
Ahí está el talento del galés de poner sus obras de poesia en las letras de sus temas. ¡Menudo talentoso que es! a parte de ser un músico brillante, un artista auténtico.
Pero hablando de talentos, a quienes se goza de escuchar en ese álbum. Es decir, aquellos músicos que habían sido escogidos por el bajista magistral de Deep Purple muestran que él sí sabe escuchar también.
Con los estilos que se cambian en el disco va que toman el relevo en la guitara. Los que salen (véanse nombrados en el estas páginas) que perfuman las ármonias y las melodias acompañando con el grupo y tocando sólos. Claro que con dicha variación en los estilos de canciones también estrena una serie de distintos modelos de guitaras, así que dan otro aspecto de un álbum de instantáneas.
Sobre todo sorprende el cantante y teclista Randall Bramblett. Gracias a su capacidad de variar su tono se está pensando de vez en cuando, ¿a quién coño me hace recordar? Pero vamos, a veces suena un poco como Clapton, Knopfler, luego tiene un poco de Dylan, Robert Palmer. Uniendo y sacando todos estos estilos a su voz, le hace bastante único.
Sin embargo, hay dos demás que cantan. La segunda canción (Burn me up slowly) es de cantante el Roger Glover mismo, que nos concede esa raridez más bonita. Se puede suponer que esa su “snapshot” más personal que nos presenta, así se lo indican las letras hablando de la vida que le queda como “quémame despacio” (que es el título) y que mientras el tiempo quiere pasar “rodeado por la música” (en el refrán).
El tema “Bargain Basement” para mí nos regala la revelación más desesperada del álbum: canta Gillian Glover, nadie menos que la propia hija del autor del disco. Tiene una voz preciosa, muy comoda, y espero que salga en un futuro para (en)cantarnos con música suya.
¡Venid, echadle un vistazo a estas instantáneas!